GKS 2232 4º: Guaman Poma, Nueva corónica y buen gobierno (1615)

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Judgments of Father Martín de Ayala, the author’s brother (747-748)

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SENTENCIAS

tratos ni grangerías.

Era cristianícimo hombre. Antes hacía limosna a los pobres yndios, que no a los rricos españoles. Y jamás rrondaua de día ni de noche ni andaua por las calles. En su oficio lo uzaua muy onrradamente y confesaua de las niñas y donzelas hasta las biejas y yndios. Acababa de confesar cin alquilar splo y estaba bien enquisto en la dotrina y curato. Y no quería ser uicario ni jues por no hazer mal a los pobres yndios.

Y sentenció este cristiano y dixo que los padres an de ser sugeto a sus perlados y no auían de hordenarse niño, cino de edad de cinqüenta años, ni meterse justicia ni tener tratos ni tener muger ni criados. Y ancí sentenció y jusgó, para que su Santidad el papa de Roma y su Magestad lo sentenciase de los dichos capítulos y quexa.

Sentenció el padre Martín de Ayala1, cura y beneficiado del hospital y pobres yndios de Jesucristo, enfermos de la santa casa del hospital de la ciudad de Guamanga. Este dicho padre Martín de Ayala fue mestizo, hijo de un cauallero prencipal y nieto de Topa Ynga Yupangui [sic], señor y rrey deste rreyno. Pero fue muy santo hombre, lo qual sentenció a los mestizos y criollos deste rreyno con su umildad y caridad, amor de Dios y penetencia y limosna y santa obra, seruicio de Dios y de su Magestad.

Como desde edad de ciete años entró a seruir a Dios en el hospital de la ciudad del Cuzco y rrecibió ábito de hermitaño y dallí se hizo zaserdote de misa. Y, seruiendo a Dios, murió en ella de edad de quarenta años. Pero hizo muchos milagros y sentenció para memoria que fuese sentenciado por el papa de Roma y por su Magestad en los capítulos.

Sentenció el Juan García de la Uega2, minero de su Magestad en la uilla rrica

1 Véanse pp. 14, 612 y notas.

2 Juan García de la Vega, minero y residente en Oropesa de Huancavelica, se menciona en Jiménez de la Espada [1586], 1965 [Bib], t. I: pp. 197-198, por haber fundado una capellanía en el monasterio de Santo Domingo de Huamanga en 1582.